Uno de esos que lejos de sugerir una imagen de lo más ñoña, refleje personalidad, espontaneidad y cierto descaro con un punto candy. Este look deja claro que “nunca es demasiado rosa” y si tú también eres de las que siente debilidad por este “dulce” color, puede que te resulte imposible resistirte a lucirlo esta temporada. Construir un outfit a partir de una tonalidad y añadir contraste con los complementos siempre es apuesta segura. Además, crear un look a partir de un único tono facilita combinar diferentes estampados entre sí. Una manera muy práctica de apostar por el Mix and Match sin morir en el intento...
Girls just wanna have DONUTS!


LA CLAVE
Un estilismo en clave naif se caracteriza por estar compuesto por prendas con estampados delicados en colores pasteles. En este caso, los detalles de lazos no podrían “adornar” mejor los cuadros de la falda.
Al elegir un jersey con un diseño tan cargado de “ingenuidad”, una falda mini con un toque atrevido, que compense la dulzura de la otra prenda, resulta ideal.

Los complementos aportan una de cal y otra de arena. El clutch realza la frescura e “inocencia” del look. Por su parte, los zapatos altos en rosa neón, con detalles de trasparencias y tiras acordonadas al tobillo, contribuyen a suavizar ese lado más aniñado.

El atrevido peinado recogido en dos coletas altas consigue reforzar la simpatía del look, haciéndole un guiño a nuestra niña interior.
Las graciosas gafas de corazón, sumadas a los “tentadores” pendientes donuts, ponen el definitivo toque girly a un estilismo que no pasa desapercibido.
Un maquillaje muy natural, que exalta un aspecto fresco y juvenil, completa este total pink look.
EL RESULTADO
Un look perfecto para quienes la moda es el mejor pretexto para “divertirse”.
LA CLAVE
Un estilismo en clave naif se caracteriza por estar compuesto por prendas con estampados delicados en colores pasteles. En este caso, los detalles de lazos no podrían “adornar” mejor los cuadros de la falda.
Al elegir un jersey con un diseño tan cargado de “ingenuidad”, una falda mini con un toque atrevido, que compense la dulzura de la otra prenda, resulta ideal.

El atrevido peinado recogido en dos coletas altas consigue reforzar la simpatía del look, haciéndole un guiño a nuestra niña interior.
Las graciosas gafas de corazón, sumadas a los “tentadores” pendientes donuts, ponen el definitivo toque girly a un estilismo que no pasa desapercibido.
Un maquillaje muy natural, que exalta un aspecto fresco y juvenil, completa este total pink look.
