Enfatizar la controvertida combinación rosa/rojo o, por el contrario, romper el binomio de color predominante. Yo, indudablemente, he apostado por la primera opción al añadir una ceñida camiseta roja al conjunto. 

Ésta, además de acentuar el colorido ya existente, ayuda a dibujar la silueta al ajustarse al cuerpo.

Los complementos aportan un gran valor extra al contribuir a personalizar 100% el estilismo propuesto.

Por un lado, los pendientes y el clutch rígido suman singularidad con su también diseño y detalles de “divertidas bocas”. Este último incorpora un toque de negro para contrastar e incluso un vistoso cierre con lipstick.

Por otro lado, los zapatos elegidos ensalzan la feminidad del outfit y dejan claro que lucir taconazo con prendas de aire más sport ya no resulta un escándalo. En efecto, una imagen vale más que mil palabras: los llamativos tacones de aguja fucsias elevan el look al realzar las piernas.

El peinado, en sencillas y desenfadadas coletas bajas, potencia el lado más juvenil del estilismo y el toque de color rojo de labios, por el contrario, rebaja la dulzura que se desprende para añadir más fuerza.

Un perfecto look para salir a “comerte el mundo”.