No siempre y es que en el “mundo fashion” las afirmaciones rotundas no tienen cabida. Nuestra osadía y estilo único pueden romper esquemas hasta el punto de conferir un carácter totalmente opuesto a un estilismo intrínsecamente más formal.
Este look para el que se han seleccionado varios tejidos, muy diferentes pero perfectamente combinables entre sí, es una excelente muestra de ello. Combinar la delicadeza del tul con la fuerza del metal y la sutileza del raso provoca que el color negro, dominante en el estilismo, pierda autoridad, tiñéndose de matices más divertidos.