Será el verde lima el color que más dará que hablar este 2019, como ya han vaticinado los mejores looks de street style alrededor del mundo, de hecho, su versión fosforita protagoniza los outfits casual más impactantes. Estas tonalidades tan llamativas llenan de vida cualquier estilismo y, por este motivo, resultan las compañeras ideales para las prendas más oscuras y sobrias.


LA CLAVE
Dado que en el “panorama fashion” el pasado está más de moda que nunca, podemos lucir nuestra prenda flúor en total looks en clave ochentera (como ya os mostré justo en el post que precede a éste) o combinarla con otras prendas “retro” en tendencia, como el mítico pantalón de campana que ya arrasó en los 90’s.

Si nos inclinamos por esta segunda opción, no hay duda de que un ajustado jersey cropped en un favorecedor tono verde casa a la perfección con unos sencillos flare pants negros, pues ambos se ajustan inmejorablemente al cuerpo siguiendo las líneas de la silueta femenina.
Los complementos añadidos contribuyen, en este caso, a subrayar la estética de una generación marcada por el triunfo de grandes divas del pop e inolvidables girl bands, que lucían plataformas de vértigo y llamativos accesorios. Los botines negros con elevada plataforma y detalle de estrella contribuyen a que el pantalón de campana siente “como un guante” y el original bolso radio cassette en glitter revive otro elemento retro (musical) imprescindible de la época.

Los destacados pendientes amarillos neón hacen un guiño a una de las tendencias más extravagantes de la citada generación, consistente en lucir mechones de vivos colores; pero es la gorra baker boy negra la que pone la guinda a un peinado muy desenfadado al más puro estilo “teen” de la época.
EL RESULTADO
Un look fresco y juvenil perfecto para las más atrevidas y nostálgicas que, al mismo tiempo, sienten debilidad por lucir las últimas tendencias.
LA CLAVE
Dado que en el “panorama fashion” el pasado está más de moda que nunca, podemos lucir nuestra prenda flúor en total looks en clave ochentera (como ya os mostré justo en el post que precede a éste) o combinarla con otras prendas “retro” en tendencia, como el mítico pantalón de campana que ya arrasó en los 90’s. Si nos inclinamos por esta segunda opción, no hay duda de que un ajustado jersey cropped en un favorecedor tono verde casa a la perfección con unos sencillos flare pants negros, pues ambos se ajustan inmejorablemente al cuerpo siguiendo las líneas de la silueta femenina.
Los complementos añadidos contribuyen, en este caso, a subrayar la estética de una generación marcada por el triunfo de grandes divas del pop e inolvidables girl bands, que lucían plataformas de vértigo y llamativos accesorios. Los botines negros con elevada plataforma y detalle de estrella contribuyen a que el pantalón de campana siente “como un guante” y el original bolso radio cassette en glitter revive otro elemento retro (musical) imprescindible de la época.

Los destacados pendientes amarillos neón hacen un guiño a una de las tendencias más extravagantes de la citada generación, consistente en lucir mechones de vivos colores; pero es la gorra baker boy negra la que pone la guinda a un peinado muy desenfadado al más puro estilo “teen” de la época.

EL RESULTADO
Un look fresco y juvenil perfecto para las más atrevidas y nostálgicas que, al mismo tiempo, sienten debilidad por lucir las últimas tendencias.